lunes, 23 de agosto de 2010

Principios de la botánica para plantas acuáticas

¿Sabemos qué es una planta? Si la vemos, seguro que la reconoceremos, pero si hay que definirlas, muchas serían las formas en que se podrían exponer.

Además, las conocemos por su nombre; pero en ocasiones surgen dudas sobre el mismo, ya que en cada región o país se le da un nombre distinto. Todo esto se evita utilizando el nombre científico.

Nuestras plantas se agrupan en conjuntos con unas características diferenciadoras, y varios en otros más grandes, y otros…

Esta es la
clasificación taxonómica, misma que abordaremos en este artículo además de otras formas de clasificación que veremos más someramente.

     

Acuario plantado (Viko)

Todas y todos tenemos una idea de las partes que tienen las plantas y sus funciones, pero en el caso de las acuáticas eso no está tan claro como podría pensarse, ya que las funciones y estructuras cambian según la planta a la que nos estemos refiriendo.

Nombre vulgar y Nombre científico
La forma común de referirnos a una planta es utilizar su nombre. Por ejemplo, hablemos de una espada amazónica: en este caso estamos utilizando el nombre común o vulgar, y puede ser una única palabra (cabomba) o dos (espada amazónica), e incluso más (helecho de java windelov).

Pero, como ya hemos comentado, en cada región o país, por no hablar de idiomas, nos podemos referir a la misma planta de formas distintas y para eso se creó el nombre científico. Esto no es muy común en las plantas acuáticas (entre regiones o países, pero sí por supuesto en idiomas). Tomando como ejemplo la espada amazónica, su nombre científico es Echinodorus amazonicus. En este caso, la utilización de letra en cursiva no es aleatorio, sino que cumple una de las normas cuando se utilizan nombre científicos: éstos deben ir siempre en cursiva.

Echinodorus amazonicus (Jorge las Heras)

Estas normas son las que recoge el Código Internacional de Nomenclatura Botánica. Aquí no vamos a entrar en nombrar a los autores de la determinación de cada planta, que deberá ir tras el Nombre Científico (Echinodorus amazonicus (Rataj) de Wit), pero quien quiera ampliar conocimientos, puede consultar el Código citado.

En principio vamos a considerar que para referirnos a una planta o especie utilizaremos dos palabras:
  • la primera de ellas se corresponde con el Género: en nuestro ejemplo Echinodorus; debe ir la primera letra en mayúsculas.
  • la segunda hace referencia a la especie: en nuestro caso amazonicus, siempre en minúsculas.

Ahora vamos a analizar qué es lo que pasa cuando son más las palabras que definen científicamente a una planta, poniendo algunos ejemplos:

Cryptocoryne wendtii «green»: se trata de un cultivar (palabra derivada de cultivo y variedad); la primera palabra sigue siendo el Género; la segunda, la especie, y la última, que debe aparecer entre comillas, se refiere al cultivar del que se trata. Son plantas que se han cultivado para remarcar alguna de sus características, en nuestro caso para hacerlas más bellas.
Alternanthera reineckii var. roseifolia: es una variedad de la Alternanthera reineckii; la primera indica el Género, la segunda la especie, el término var. indica que a continuación aparecerá la denominación de la variedad concreta.
Echinodorus cordifolius subsp. cordifolius: en este caso se trata de una subespecie de esta misma especie.
Cabomba sp.: se utiliza para referirnos a una de las especies de Cabomba, pero que no sabemos o no queremos definir.
Cabomba spp.: para referirnos a varias especies del Género Cabomba.
• Un caso especial son los híbridos, en los que la nomenclatura es más compleja, pero para no complicarnos mucho basta con decir que se suelen nombrar utilizando el nombre científico de las dos plantas separados por el signo “x” o el nombre del Género seguido de “x” y la denominación del híbrido entrecomillada ,y nunca en latín, como por ejemplo Echinodorus x "Lothario".

Cryptocorine wendtii “green” (Oscar Pauner)

Cabomba sp. (Elena C.)

Alternanthera reineckii var. reoseifolia (Oscar David)



No es un repaso muy exhaustivo pero nos servirá para aclarar un poquito el por qué de estos extraños nombre y abreviaturas.

Taxonomía
Se trata de la forma en que se agrupan las especies en otros categorías superiores; cada una de estas categorías se denominan taxón. Actualmente hay un gran debate en torno a la forma en que se clasifican, pero esto no nos interesa para este artículo, y se utilizarán los taxones más utilizados o aceptados.

Veremos a continuación cómo se organizan estos taxones. Ya hemos visto qué es una especie y las denominaciones que hay bajo ellas (subespecie, variedad, cultivar). Para dar una visión más clara, ahora comenzaremos desde los más alto para llegar hasta la especie.

Reino: se consideran actualmente seis reinos, aunque aún perdura la clasificación en cinco. Los seis reinos mencionados son: Bacteria, Protozoa, Chromista, Fungi, Plantae, Animalia. El único Reino que nos va a interesar para esta revisión es el Reino Plantae.

División: aquí también hay varias corrientes que señalan un número variable de Divisiones. Consideraremos la más aceptada o de mayor difusión, y sólo señalaremos aquellas que son más interesantes para nuestros propósitos, y son Hepaticophyta (hepáticas), Bryophyta (musgos), Pteridophyta (helechos) y Magnoliophyta (plantas con flores).


Monoselenum tenerum, Hepaticophyta (Marco Pérez)

Vesicularia dubyana, Bryophyta (Jorge las Heras)

Microsorum pteropus, Pteridophyta (Jorge las Heras)

Nymphaea daubenyana, Magnoliophyta (Edonis)

Clase: en este orden son muchos los taxones que nos interesan, pero no indicaremos ninguno de ellos, dejándolo para el Anexo I donde aparecerán todos las especies de nuestro Atlas Dr. Pez.

Por debajo de Clase se encuentra Orden, después Familia y, por último, Género.

Todas estas agrupaciones admiten subconjuntos intermedios denominándose Subreino, Suborden,… y así en todas ellas; algunas otras pueden tener Súper-, pero son pocas (Súperdivisión). Además, hay otros con menos uso como son Tribu y Subtribu, que se encontrarían entre Género y Familia.

Veamos algunos ejemplos con plantas que comúnmente podemos encontrar en nuestro acuarios:

Taxón Musgo de Java Cadena de musgo Helecho de Java Helecho de Sumatra
Reino Plantae Plantae Plantae Plantae
División Bryophyta Bryophyta Pteridophyta Pteridophyta
Clase Bryopsida Bryopsida Filicopsida Filicopsida
Orden Hypnales Hypnales Polypodiales Polypodiales
Familia Hypnaceae Amblystegiaceae Polypodiaceae Parkeriaceae
Género Vesicularia Leptodictyum Microsorum Ceratopteris
Especie Vesicularia dubyana Leptodictyum riparium Microsorum pteropus Ceratopteris thalictroides

Taxón Espada enana Sagitaria Cryptocoryne beckettii Lechuga de agua
Reino Plantae Plantae Plantae Plantae
División Magnoliophyta Magnoliophyta Magnoliophyta Magnoliophyta
Clase Liliopsida Liliopsida Liliopsida Liliopsida
Orden Alismatales Alismatales Arales Arales
Familia Alismataceae Alismataceae Araceae Araceae
Género Echinodorus Sagittaria Cryptocoryne Pistia
Especie Echinodorus tenellus Sagittaria subulata Cryptocoryne beckettii Pistia stratiotes

Taxón Glosostigma Ambulia Rotala enana Banana acuática
Reino Plantae Plantae Plantae Plantae
División Magnoliophyta Magnoliophyta Magnoliophyta Magnoliophyta
Clase Magnolipsida Magnolipsida Magnolipsida Magnolipsida
Orden Scrophulariales Scrophulariales Myrtales Solanales
Familia Scrophulariaceae Scrophulariaceae Lythraceae Menyanthaceae
Género Glossostigma Limnophila Rotala Nymphoides
Especie Glossostigma elatinoides Limnophila sessiliflora Rotala indica Nymphoides aquatica

Tabla 1: algunos ejemplos de clasificación taxonómica de plantas de acuario (elaboración propia).

Podemos comprobar como todas son del mismo Reino (evidentemente) agrupadas en Divisiones. Aquí aparecen cuatro (4) Clases, aunque hay más que son interesantes para lo que nos ocupa. Muchos son los Órdenes en que se agrupan, y qué decir del gran número de Órdenes, Familias y Géneros que podemos encontrar. En el Anexo I podemos encontrar todas las especies contenidas en el Atlas de Dr. Pez, agrupadas según su taxonomía.

Mirando estas tablas podemos ver cómo están emparentadas plantas como glosostigma y ambulia, siendo ambas de la misma familia, o las criptocorines y la lechuga de agua que también comparten familia, aunque nos parezca poco semejantes. Hay plantas que se parecen mucho externamente, como algunas criptocorines y echinodorus y ambas proceden de familias distintas. A esto se le conoce como convergencia adaptativa.

Glossostigma elatinoides (Jorge las Heras) 

Limnophila sessiliflora (Alberto Villarroya)

Cryptocoryne walkeri (MonoBarrientos)

Pistia stratiotes (Oscar David)

Partes de una planta acuática y sus funciones
Generalidades: las plantas acuáticas son denominadas genéricamente como hidrófitas. En éstas se incluyen las siguientes:

- Palustres o anfibias: con las raíces en el sustrato y gran parte de su parte aérea fuera del agua; éstas, en principio, no nos interesan, por no ser propiamente de acuario, (por ejemplo Cyperus spp.).
- arraigadas totalmente sumergidas (TS).
- con hojas flotantes: con todas las hojas flotantes o sólo con parte de ellas (heterofilia); están enraizadas en el fondo (en adelante HF).
- libres sumergidas (LS).
- libres flotantes (LF).

Bacopa monnieri (Alleslecker)

Nynphaea stellata (Luckyluke)

Ceratopteris thalictroides (Jorge las Heras)

Limnobium laevigatum (Alexi Llovet)

Todas tienen una estructura herbácea ya que no presentan tallos lignificados (no hay madera en ellos). En cuanto a colores, normalmente son verdes (predominancia de clorofilas), aunque las podemos encontrar con tonos rojizos, amarillentos y mezclas y combinaciones de todos ellos. Incluso puede ocurrir que algunas hojas tengan una coloración, por ejemplo las sumergidas, y otro distinto en las emergentes o flotantes.

A continuación veremos cada una de las partes de nuestras plantas, indicando sus funciones y estructuras.

Raíces
En principio, este órgano tiene la función de anclaje de la planta al sustrato o a rocas y troncos. Otra función muy importante es la absorción de agua y nutrientes, pero en nuestra plantas de acuario ésta se realiza por toda la planta, incluso por las raíces, pero no tiene la misma importancia que en las plantas terrestres, que depende exclusivamente de ellas para tomar agua y los distintos compuestos nutricionales necesarios para su buen desarrollo.

La función de anclaje está muy clara en las plantas TS y HF, ya que consiguen asentarse en el sustrato gracias a ellas. En el resto de plantas (LF, LS), está claro que la función de sujeción no cabe, pero si la de absorción; posiblemente sea reminiscencia de un pasado en el que vivían ancladas.

Hay dos tipos de raíces, dependiendo de su distribución, crecimiento y tamaño:

a) Sistema radicular alorrizo o raíces axonomorfas: característico de las Magnoliopsidas (dicotiledóneas), se trata de un sistema ramificado, con una raíz principal, varias secundarias que salen de la principal, terciarias de cada una de las secundarias y así sucesivamente.

Raíces axonomorfas

b) Sistema homorrizo o fasciculadas: característico –no exclusivo- de las Liliopsidas (monocotiledóneas), no presenta una raíz principal, sino que todas parten del mismo punto con similar grosor.

Raíces fasciculadas

Pero tenemos casos especiales dentro de nuestras plantas, con modificaciones de las raíces o partes que se asemejan:

- las Pteridophyta TS suelen presentar rizomas, que no son raíces en sentido estricto, sino tallos modificados que crecen subterráneamente y cada vez que emerge del sustrato desarrolla hojas y raíces.

- Las LF, donde lo que parecen ser las raíces, en algunos casos, son hojas modificadas, como en las especies del Género Salvinia.

- Algunas de nuestras plantas presentan raíces adventicias, que son raíces que no crecen en el punto donde se desarrollarían normalmente. Normalmente su función es la de conseguir aire para la planta, además de dar mayor sujeción. Podemos verlas en Géneros como Egeria o Limnophila.

Egeria densa (Luckyluke)

Llegado a este punto hay que señalar que los musgos (Bryophyta) y las hepáticas (Hepaticophyta) no presentan raíces verdaderas, sino rizoides, que únicamente tienen la función de anclaje y que son tejidos que no se diferencian de los del resto de la planta.

Tallos

Casi todas nuestras plantas presentan tallos herbáceos que se encargan de sostener al resto de órganos de la planta, a la vez que son el origen de ellos, tales como las hojas. Al presentar pigmentos fotosintéticos también realizan la fotosíntesis.

En los tallos podemos encontrar dos partes bien diferenciables: los nudos, de donde parten las hojas y las flores, e incluso nuevos tallos o raíces adventicias; los entrenudos, que no son más que los espacios entre cada nudo.

Partes del tallo (elaboración propia)

Estos tallos se mantienen erguidos gracias a un tejido, denominado aerénquima, que está lleno de aire, lo que le permite flotar. Pero hay algunas plantas donde los tallos no están tan claros:

- plantas en roseta: también se les denomina acaules, y se trata de tallos extremadamente cortos, sin apenas entrenudos, por lo que todas las hojas parecen partir de un mismo punto.
- Estolones: son tallos rastreros de los que salen nuevas plantas, echando raíces desde cada uno de sus nudos y apareciendo hojas. El caso más popular es el de las Vallisnerias spp..
- Rizomas: son tallos subterráneos que crecen horizontalmente. Esto es común sobre todo en los helechos.
- Bulbos: un tipo especial de tallo es el bulbo (normalmente en HF); no es más que un ensanchamiento donde se almacenan sustancias de reserva y cuando ha desaparecido la parte aérea permite que vuelva a brotar.

No hay que confundir tallos con peciolos largos y gruesos de algunas especies (lo veremos en el siguiente apartado).

Roseta en Pogostemon helferi (Víctor Ruiz)

Estolones en Vallisneria natans (Luckyluke)

Rizomas en Microsorum pteropus (Rene MG)

Bulbo en Nymphoides aquatica (Andrés Roca)


En las Bryophyta y Hepaticophyta, al igual que ocurría con las raíces, no existen tallos verdaderos, sino cauloides con la función de soporte.

Hojas

Las hojas son los principales órganos encargados de llevar a cabo la fotosíntesis y, como consecuencia de esto, de realizar los intercambios gaseosos con el agua y/o aire y de nutrir a las plantas. La presencia de clorofilas y otros pigmentos es muy marcada en las hojas, dando la coloración característica a la planta.

Las hojas están formadas por tres partes principales:

a) Peciolo o lígula: es la parte de unión del resto de la hoja con el tallo; cuando es alargado se denomina peciolo (dicotiledóneas) y cuando envuelve al tallo lígula (monocotiledóneas).

b) Limbo: es la parte más ancha de las hojas, con formas variables y tamaños variables. Tiene dos caras, el haz (expuesta a la luz) y el envés.

c) Nervios: recorren todo el limbo y pueden estar distribuidos en forma ramificada (típico de las dicotiledóneas) o paralela (en monocotiledóneas).

Partes de una hoja (Elaboración propia)

Los limbos de las plantas acuáticas suelen ser bastante grandes en algunos casos y casi siempre de pequeño grosor, comparados con las plantas terrestres. En el caso de los helechos, a las hojas se les denomina frondes; en los musgos no se pueden considerar hojas, recibiendo el nombre de filoides.

Las hojas en las HF pueden ser distintas dependiendo de si son las que están sumergidas o flotantes. Pero, además, casi todas las plantas de nuestros acuarios tienen una gran capacidad de adaptación a distintos ambientes, con lo que la misma planta bajo condiciones distintas, por ejemplo de iluminación, pueden presentar variaciones en el tamaño y forma de sus hojas. Un caso muy llamativo es el de la LF, donde las hojas son muy distintas en su haz y envés, con presencia de estomas en el haz y sin ellos o muy pequeña cantidad en el envés.

Tenemos dos tipos de hojas distintos, según su limbo:

- hojas simples: con el limbo entero, sin ninguna división.
- hojas compuestas: con el limbo partido en varias partes, conociéndose cada una de ellas como foliolo.

Anubias gracilis (Monover)

Limnophila sessiliflora (Alberto Villarroya)

Según la forma del limbo, de su borde, de su simetría, etc. las hojas reciben unos nombres distintos; para profundizar se puede consultar alguna de las páginas que aparecen en la bibliografía.

En las Bryophyta y Hepaticophyta no existen hojas como tal, sino que son estructuras similares, con las mismas funciones, que reciben el nombre de filidios.

Flores
Aunque, en principio, no es nunca nuestra intención la de que se reproduzcan nuestras plantas, en algunos casos resulta muy interesante y atractivo ver su floración. Esta floración es síntoma de que los recursos que les estamos aportando son muy parecidos a los que encuentra en la naturaleza y hasta cierto punto de su bienestar. En algunas especies es verdaderamente complicado conseguirla y en algunos casos es casi lo más importante de la planta (nenúfares, por ejemplo).

Sólo en la División Magnoliophyta encontramos estas flores. Un esquema de una flor tipo es el que aparece a continuación:

Partes de una flor (Elaboración propia)

Según el esquema anterior, una flor consta de las siguientes partes:

- Receptáculo: también denominado tálamo, de donde se originan todas las otras partes.

- Perianto: es el conjunto de partes auxiliares a la reproducción y son:
Cáliz: formado por sépalos, normalmente de color verde.
Corola: integrada por pétalos, con colores muy llamativos y de gran tamaño en muchas ocasiones.

- Androceo: conjunto de todos los estambres de la flor, es la parte masculina; cada estambre está compuesto por:
Filamento, que es la parte alargada donde se inserta la antera.
Antera, donde se aloja el polen.

- Gineceo: parte femenina de la flor, formada por:
Ovario: donde se encuentran los óvulos.
Estilo: conecta el ovario con el estigma.
Estigma: encargado de la recepción del polen.

Flores de Nymphoides humboldtiana (Davidjchj17)

Anubias gracilis (Xema Romero León)

Nymphoides peltata (Víctor Ruiz)

Ya sabemos que su función es la reproducción sexual de la planta. Una flor puede tener ambos sexos (masculino y femenino), siendo estas flores hermafroditas o flores perfectas, o sólo uno de ellos.

Frutos
Muy complejo obtener frutos y semillas en nuestras plantas acuáticas, pero no debemos olvidar que es uno de sus fines, la reproducción sexual mediante semillas. Pero si ya hemos dicho que es compleja la floración, el éxito de la fecundación se convierte en un nuevo problema para conseguir que se formen frutos y estos sean portadores de semillas. No mencionaremos nada más sobre ellos, por su escaso interés para nuestros fines.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

excelente articulo, todo muy explicado.
Solo un pero, y es que hay un par de fotos, la cabomba y la alternanthera reineckii que tienen cambiados los nombres

Saludos

Unknown dijo...

Gracias por el artículo, es muy completa la información. Incluir plantas en nuestro hogar puede traernos muchos beneficios, y debemos ser conscientes que requieren cuidados especiales, en lo personal me gustan las plantas acuáticas, pues me parece que dan la sensación de tranquilidad y paz, por eso es importante tenerlas en un lugar adecuado.